Soneto con estrambote del poema definitivo
Nunca podré escribir ése poema
que aguante mil millones de lecturas,
una tras otra, recias, firmes, duras,
y acabe convirtiéndose en emblema
siempre regenerado de un problema
crucial e irresoluble que aseguras
de golpe descifrar en cuanto apuras
las últimas palabras -pero quema
igual de abrasador a cada encuentro
futuro y azaroso, nunca amaina
su influjo que, empujando a la reyerta,
dispuesto a derrocarte, desenvaina
una afilada daga que en el centro
más vulnerable y frágil siempre acierta-.
(El único poema que podría
hacer que sientas lo que yo por dentro
cuando despierto con tu compañía).
3 de Mayo de 2008
Nunca podré escribir ése poema
que aguante mil millones de lecturas,
una tras otra, recias, firmes, duras,
y acabe convirtiéndose en emblema
siempre regenerado de un problema
crucial e irresoluble que aseguras
de golpe descifrar en cuanto apuras
las últimas palabras -pero quema
igual de abrasador a cada encuentro
futuro y azaroso, nunca amaina
su influjo que, empujando a la reyerta,
dispuesto a derrocarte, desenvaina
una afilada daga que en el centro
más vulnerable y frágil siempre acierta-.
(El único poema que podría
hacer que sientas lo que yo por dentro
cuando despierto con tu compañía).
3 de Mayo de 2008
1 comentario:
Ilustración 'Despertar' de Rafael Robas
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